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lunes, 21 de febrero de 2011

El pico de la pesca

Se habla del "pico del petróleo" -- en inglés "peak oil" -- refiriéndose al hecho de que la extracción de crudo de las cavidades de la tierra es limitada. Llegará (ya llegó) a un máximo, y luego comenzará a declinar lentamente.
Con la extracción de peces para el consumo humano pasa lo mismo, o casi. Nos lo advierte Juan Santini en Vadenuevo, revista digital mensual, en su artículo Alerta, la pesca se agota.
La diferencia de la producción pesquera con el "peak-oil" es que el petróleo no se puede producir y que los peces, en cambio, sí se pueden criar.
"Uruguay tiene excelentes condiciones para el desarrollo de la acuicultura y en especial la piscicultura. Nuestro país no ha sido capaz de desarrollar una política de pesca que le reportaría extraordinarios beneficios y sería decisiva para el pregonado país productivo." dice. La pesca se agota en todo el mundo y Uruguay debería promover políticas de desarrollo y fomento de la acuicultura, es decir el cultivo de peces y vegetales acuáticos para el consumo humano.
Nos da un dato interesante: mientras que en 1980 solo el 10% de la producción pesquera venía de la acuicultura, hoy llega y pasa el 50%. Este desarrollo se debe esencialmente a China que produce el 90% de su consumo en granjas acuáticas.
Santini detalla los obstáculos políticos e ideológicos con que tropieza la promoción del desarrollo de la acuicultura. Y da cifras del potencial productivo de esa industria.
La nota es extensa, habla de política, de trabas, de burocracia, de cantidades y de técnicas, de mercados y de especialidades. Recomienda el pejerrey, por ejemplo, como pez a cultivar. Es un tema de política, de país productivo, de mediocridad y de corrupción. También de fin de mundo, de estar al borde del abismo y no darnos cuenta. Imperdible.

El asunto de la acuicultura es un poco como cuando la humanidad pasó de la caza y la recolección a la producción, es decir, a la cría de animales y el cultivo de plantas.
Parece que, en esto, el Neolítico llega con 10 mil años de retraso. La pesca, en el sentido de la depredación de la biomasa existente, no da más, y empieza a regresar, a extinguir especies. Se calcula que para el 2050 no habrá más ni peces ni mariscos para pescar. ¿Nos despertamos?

1 comentario:

  1. Reflexión interesante...e inquietante acerca de un tema que no es habitla en este blog.

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